El espionaje del régimen chino sobre los ciudadanos estadounidenses habría alcanzado un nivel de vigilancia masiva, con la intercepción de comunicaciones telefónicas de celulares abonados en suelo norteamericano, según la investigación de un ex ejecutivo de seguridad de redes móviles.
La pesquisa y el análisis fue realizado por Gary Miller, quien compartió a The Guardian sus descubrimientos sobre la actividad del gigante asiático a través de las redes 3G y 4G enrutados mediante un operador estatal, China Unicom, lo que dejaría pocas dudas sobre la responsabilidad del régimen de Xi Jinping detrás de la operación.
Miller ha pasado años analizando informes de inteligencia y reportes de tráfico de señales entre operadores móviles extranjeros y locales. Así, descubrió que estos presuntos ataques estarían utilizando redes del Caribe para realizar la vigilancia, que apunta a rastrear e interceptar las comunicaciones telefónicas. Según indicó, decenas de miles de usuarios de móviles de EEUU se han visto afectados por este esquema entre 2018 y 2020.
El espionaje del régimen chino sobre los ciudadanos estadounidenses habría alcanzado un nivel de vigilancia masiva, con la intercepción de comunicaciones telefónicas de celulares abonados en suelo norteamericano, según la investigación de un ex ejecutivo de seguridad de redes móviles.
La pesquisa y el análisis fue realizado por Gary Miller, quien compartió a The Guardian sus descubrimientos sobre la actividad del gigante asiático a través de las redes 3G y 4G enrutados mediante un operador estatal, China Unicom, lo que dejaría pocas dudas sobre la responsabilidad del régimen de Xi Jinping detrás de la operación.
Miller ha pasado años analizando informes de inteligencia y reportes de tráfico de señales entre operadores móviles extranjeros y locales. Así, descubrió que estos presuntos ataques estarían utilizando redes del Caribe para realizar la vigilancia, que apunta a rastrear e interceptar las comunicaciones telefónicas. Según indicó, decenas de miles de usuarios de móviles de EEUU se han visto afectados por este esquema entre 2018 y 2020.