Trump anuncia aranceles recíprocos: “Si nos imponen un arancel, nosotros les imponemos el mismo”
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este jueves desde el despacho oval de la Casa Blanca la implementación de “aranceles recíprocos” contra los socios comerciales de la nación. “Si nos imponen un arancel o un impuesto, nosotros les imponemos exactamente el mismo nivel de arancel o impuesto, es así de sencillo”, declaró Trump, marcando un nuevo capítulo en su prolongada guerra comercial.
La medida, que busca corregir lo que el mandatario describe como prácticas comerciales injustas, se adaptará a cada país, tomando en cuenta factores como el déficit comercial y el impuesto al valor agregado (IVA). Según explicó un alto funcionario, los países con mayores desequilibrios comerciales serán los primeros en enfrentar estos gravámenes, que podrían entrar en vigor en las próximas semanas o meses.
“Todo el mundo se ha aprovechado de EEUU y hemos pagado un precio alto por ello. Estados Unidos ha ayudado a muchos países con un gran costo financiero, y ahora es el momento de que esos países nos traten de manera justa”, afirmó Trump, señalando que incluso los aliados a menudo aplican medidas más severas que algunos de sus adversarios en términos comerciales.
La decisión se anunció pocas horas antes de que el presidente se reuniera en Washington con el primer ministro indio, Narendra Modi, en medio de negociaciones que podrían incluir concesiones arancelarias rápidas, como las relacionadas con motocicletas de alta gama, para suavizar el impacto en la relación bilateral.
Los analistas advierten que esta medida podría provocar una escalada en los aranceles, afectando especialmente a economías emergentes como India y Tailandia, que ya mantienen tipos arancelarios efectivos relativamente altos sobre productos estadounidenses. Por su parte, países con acuerdos comerciales sólidos, como Corea del Sur, se verán menos perjudicados.
La estrategia de Trump pretende aumentar los ingresos del país, corregir desequilibrios comerciales y presionar a otras naciones para que revisen sus políticas. No obstante, algunos economistas señalan que imponer aranceles generalizados a las importaciones de EEUU podría disparar la inflación a corto plazo y frenar el crecimiento económico. Howard Lutnick, candidato para el cargo de secretario de Comercio, ha minimizado estos riesgos, argumentando que, aunque ciertos costes podrían incrementarse, no se traducirán en una inflación generalizada.
Durante la campaña electoral, Trump había reiterado su enfoque “ojo por ojo, arancel por arancel”. Por ejemplo, si India aplicase un arancel del 25% a los automóviles estadounidenses, Washington respondería de la misma manera con un arancel del 25% sobre los productos importados de India, aunque la inclusión de factores no arancelarios podría modificar este esquema.
Con la implementación de estas medidas, la administración estadounidense busca, según analistas, equilibrar las relaciones comerciales internacionales y asegurar un trato justo para sus exportaciones, en un contexto donde las tensiones comerciales siguen siendo una prioridad en la política económica global.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este jueves desde el despacho oval de la Casa Blanca la implementación de “aranceles recíprocos” contra los socios comerciales de la nación. “Si nos imponen un arancel o un impuesto, nosotros les imponemos exactamente el mismo nivel de arancel o impuesto, es así de sencillo”, declaró Trump, marcando un nuevo capítulo en su prolongada guerra comercial.
La medida, que busca corregir lo que el mandatario describe como prácticas comerciales injustas, se adaptará a cada país, tomando en cuenta factores como el déficit comercial y el impuesto al valor agregado (IVA). Según explicó un alto funcionario, los países con mayores desequilibrios comerciales serán los primeros en enfrentar estos gravámenes, que podrían entrar en vigor en las próximas semanas o meses.
“Todo el mundo se ha aprovechado de EEUU y hemos pagado un precio alto por ello. Estados Unidos ha ayudado a muchos países con un gran costo financiero, y ahora es el momento de que esos países nos traten de manera justa”, afirmó Trump, señalando que incluso los aliados a menudo aplican medidas más severas que algunos de sus adversarios en términos comerciales.
La decisión se anunció pocas horas antes de que el presidente se reuniera en Washington con el primer ministro indio, Narendra Modi, en medio de negociaciones que podrían incluir concesiones arancelarias rápidas, como las relacionadas con motocicletas de alta gama, para suavizar el impacto en la relación bilateral.
Los analistas advierten que esta medida podría provocar una escalada en los aranceles, afectando especialmente a economías emergentes como India y Tailandia, que ya mantienen tipos arancelarios efectivos relativamente altos sobre productos estadounidenses. Por su parte, países con acuerdos comerciales sólidos, como Corea del Sur, se verán menos perjudicados.
La estrategia de Trump pretende aumentar los ingresos del país, corregir desequilibrios comerciales y presionar a otras naciones para que revisen sus políticas. No obstante, algunos economistas señalan que imponer aranceles generalizados a las importaciones de EEUU podría disparar la inflación a corto plazo y frenar el crecimiento económico. Howard Lutnick, candidato para el cargo de secretario de Comercio, ha minimizado estos riesgos, argumentando que, aunque ciertos costes podrían incrementarse, no se traducirán en una inflación generalizada.
Durante la campaña electoral, Trump había reiterado su enfoque “ojo por ojo, arancel por arancel”. Por ejemplo, si India aplicase un arancel del 25% a los automóviles estadounidenses, Washington respondería de la misma manera con un arancel del 25% sobre los productos importados de India, aunque la inclusión de factores no arancelarios podría modificar este esquema.
Con la implementación de estas medidas, la administración estadounidense busca, según analistas, equilibrar las relaciones comerciales internacionales y asegurar un trato justo para sus exportaciones, en un contexto donde las tensiones comerciales siguen siendo una prioridad en la política económica global.