Uno de los rostros más conocidos de la política progresista en España, Íñigo Errejón, ha sorprendido al anunciar su retiro de la vida pública. Errejón, de 40 años, publicó en redes sociales un breve comunicado en el que aseguró haber llegado “al límite de la contradicción entre el personaje y la persona”. Su decisión de renunciar ocurre solo un día después de participar en el Parlamento español apoyando una propuesta de su partido, Sumar, sobre regulación inmobiliaria.
Sin embargo, la salida de Errejón parece estar motivada por una serie de señalamientos de violencia psicológica y acoso sexual. Hace unos días, la periodista Cristina Fallarás compartió en redes sociales un testimonio anónimo que acusaba a un “diputado de Madrid” de ser un “maltratador psicológico” y de llevar a cabo “prácticas sexuales humillantes”. Aunque el nombre no se reveló en ese momento, múltiples testimonios similares aparecieron, creando sospechas sobre Errejón, quien poco después renunció como portavoz de Sumar, un partido que ha puesto la defensa de los derechos de las mujeres en el centro de su agenda.
El caso escaló cuando, el 25 de octubre, la presentadora de televisión Elisa Mouliaá denunció públicamente a Errejón por acoso sexual, alegando que fue víctima de su conducta en una fiesta en 2021. Mouliaá presentó formalmente la denuncia ante la Justicia española.
En su mensaje de despedida, Errejón mencionó las tensiones y actitudes tóxicas que, según él, existen en la política y que afectan especialmente a los hombres. La noticia ha sacudido el panorama político español y plantea cuestionamientos sobre la cultura de poder y las implicaciones de estas graves denuncias.
Con información de France24
Uno de los rostros más conocidos de la política progresista en España, Íñigo Errejón, ha sorprendido al anunciar su retiro de la vida pública. Errejón, de 40 años, publicó en redes sociales un breve comunicado en el que aseguró haber llegado “al límite de la contradicción entre el personaje y la persona”. Su decisión de renunciar ocurre solo un día después de participar en el Parlamento español apoyando una propuesta de su partido, Sumar, sobre regulación inmobiliaria.
Sin embargo, la salida de Errejón parece estar motivada por una serie de señalamientos de violencia psicológica y acoso sexual. Hace unos días, la periodista Cristina Fallarás compartió en redes sociales un testimonio anónimo que acusaba a un “diputado de Madrid” de ser un “maltratador psicológico” y de llevar a cabo “prácticas sexuales humillantes”. Aunque el nombre no se reveló en ese momento, múltiples testimonios similares aparecieron, creando sospechas sobre Errejón, quien poco después renunció como portavoz de Sumar, un partido que ha puesto la defensa de los derechos de las mujeres en el centro de su agenda.
El caso escaló cuando, el 25 de octubre, la presentadora de televisión Elisa Mouliaá denunció públicamente a Errejón por acoso sexual, alegando que fue víctima de su conducta en una fiesta en 2021. Mouliaá presentó formalmente la denuncia ante la Justicia española.
En su mensaje de despedida, Errejón mencionó las tensiones y actitudes tóxicas que, según él, existen en la política y que afectan especialmente a los hombres. La noticia ha sacudido el panorama político español y plantea cuestionamientos sobre la cultura de poder y las implicaciones de estas graves denuncias.
Con información de France24