Pep Guardiola y Cristina Serra: detalles de un divorcio amistoso sin terceras personas
El entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, y la empresaria textil Cristina Serra han puesto fin a su relación tras tres décadas juntos y diez años de matrimonio. La noticia, que se hizo pública a principios de enero, habría sido tomada en diciembre de 2024, según diversos medios ingleses y la periodista española Lorena Vázquez.
De acuerdo con la información divulgada, uno de los factores que habría desencadenado la ruptura sería la renovación de Guardiola con el club inglés por dos años más. Este hecho habría motivado la decisión de la pareja de tomar caminos separados, aunque se recalca que no existen terceras personas involucradas.
En el programa Y Ahora Sonsoles de Antena 3, Vázquez aseguró que Guardiola y Serra están gestionando el divorcio con un único abogado, una estrategia que busca simplificar el proceso y mantener la armonía familiar. “Quieren que sea amistoso por el bien de sus hijos. No habrá problema a nivel económico”, afirmó la colaboradora, quien también destacó que ambos comparten la crianza de sus tres hijos en común: María (24), Màrius (22) y Valentina (17).
Hasta el momento, la pareja había mantenido su vida privada en un segundo plano. Sin embargo, la noticia de su separación generó gran expectación, lo que habría aumentado la presión sobre Cristina Serra. Según Lorena Vázquez, la empresaria se siente incómoda al verse en el centro de la atención mediática. No obstante, el ambiente entre ambos se describe como cordial, a pesar de la incertidumbre que supone esta nueva etapa.
Guardiola y Serra se conocieron en 1994, cuando él tenía 23 años y ella 20. El encuentro tuvo lugar en la tienda de ropa de Serra en Barcelona, durante una sesión de fotos para el diseñador Antonio Miró. La pareja contrajo matrimonio en 2014, después de dos décadas de relación, y a lo largo de los años han compartido el desarrollo de sus respectivas carreras: la moda, en el caso de Serra, y el fútbol de élite, en el caso de Guardiola.
Con esta separación, ambos inician caminos distintos, ella dedicada a su firma de moda de lujo, Sierra Claret, en España, mientras él continúa su trayectoria en el banquillo del Manchester City. Pese al impacto mediático y la expectación generada, todo indica que el divorcio se resolverá de forma pacífica y con la mayor discreción posible, siempre pensando en el bienestar de sus hijos.
El entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, y la empresaria textil Cristina Serra han puesto fin a su relación tras tres décadas juntos y diez años de matrimonio. La noticia, que se hizo pública a principios de enero, habría sido tomada en diciembre de 2024, según diversos medios ingleses y la periodista española Lorena Vázquez.
De acuerdo con la información divulgada, uno de los factores que habría desencadenado la ruptura sería la renovación de Guardiola con el club inglés por dos años más. Este hecho habría motivado la decisión de la pareja de tomar caminos separados, aunque se recalca que no existen terceras personas involucradas.
En el programa Y Ahora Sonsoles de Antena 3, Vázquez aseguró que Guardiola y Serra están gestionando el divorcio con un único abogado, una estrategia que busca simplificar el proceso y mantener la armonía familiar. “Quieren que sea amistoso por el bien de sus hijos. No habrá problema a nivel económico”, afirmó la colaboradora, quien también destacó que ambos comparten la crianza de sus tres hijos en común: María (24), Màrius (22) y Valentina (17).
Hasta el momento, la pareja había mantenido su vida privada en un segundo plano. Sin embargo, la noticia de su separación generó gran expectación, lo que habría aumentado la presión sobre Cristina Serra. Según Lorena Vázquez, la empresaria se siente incómoda al verse en el centro de la atención mediática. No obstante, el ambiente entre ambos se describe como cordial, a pesar de la incertidumbre que supone esta nueva etapa.
Guardiola y Serra se conocieron en 1994, cuando él tenía 23 años y ella 20. El encuentro tuvo lugar en la tienda de ropa de Serra en Barcelona, durante una sesión de fotos para el diseñador Antonio Miró. La pareja contrajo matrimonio en 2014, después de dos décadas de relación, y a lo largo de los años han compartido el desarrollo de sus respectivas carreras: la moda, en el caso de Serra, y el fútbol de élite, en el caso de Guardiola.
Con esta separación, ambos inician caminos distintos, ella dedicada a su firma de moda de lujo, Sierra Claret, en España, mientras él continúa su trayectoria en el banquillo del Manchester City. Pese al impacto mediático y la expectación generada, todo indica que el divorcio se resolverá de forma pacífica y con la mayor discreción posible, siempre pensando en el bienestar de sus hijos.