Niveles de represas mejoran y suben de nivel tras últimas lluvias
Las recientes lluvias han permitido una recuperación parcial en los embalses que abastecen a Tegucigalpa y Comayagüela, según reportaron las autoridades encargadas del suministro, en el caso de la represa Los Laureles, el nivel de almacenamiento subió de un 33 a un 73 por ciento en las últimas semanas.
Por su parte, La Concepción, considerada la principal fuente de agua para la población capitalina, registró un incremento más leve, pasando de un 51 a un 54 por ciento de su capacidad total.
Sin embargo, la llegada del periodo de canícula o veranillo en las próximas semanas podría revertir estos avances, provocando nuevamente descensos en los niveles de agua previo a la temporada de lluvias más intensas del año.
Ante este escenario, las autoridades confirmaron que se mantendrán los racionamientos vigentes en la capital como medida para conservar el vital líquido.
Esto implica que los usuarios continuarán recibiendo el servicio únicamente dos veces por semana y por un máximo de doce horas cada día, manteniendo el esquema de racionamiento de tres días sin agua para asegurar la disponibilidad del recurso durante la época seca.
Las recientes lluvias han permitido una recuperación parcial en los embalses que abastecen a Tegucigalpa y Comayagüela, según reportaron las autoridades encargadas del suministro, en el caso de la represa Los Laureles, el nivel de almacenamiento subió de un 33 a un 73 por ciento en las últimas semanas.
Por su parte, La Concepción, considerada la principal fuente de agua para la población capitalina, registró un incremento más leve, pasando de un 51 a un 54 por ciento de su capacidad total.
Sin embargo, la llegada del periodo de canícula o veranillo en las próximas semanas podría revertir estos avances, provocando nuevamente descensos en los niveles de agua previo a la temporada de lluvias más intensas del año.
Ante este escenario, las autoridades confirmaron que se mantendrán los racionamientos vigentes en la capital como medida para conservar el vital líquido.
Esto implica que los usuarios continuarán recibiendo el servicio únicamente dos veces por semana y por un máximo de doce horas cada día, manteniendo el esquema de racionamiento de tres días sin agua para asegurar la disponibilidad del recurso durante la época seca.