Honduras continúa dependiendo cada vez más del mercado externo para suplir su demanda de alimentos, debido a la disminución en la producción local causada por factores como el cambio climático, las plagas y los altos costos operativos.
De acuerdo con el Banco Central de Honduras (BCH), las importaciones de bienes en el primer trimestre de 2025 crecieron un 3.0 %, alcanzando los 4,700.1 millones de dólares, con un alza significativa en suministros industriales, bienes de consumo, alimentos y bebidas.
El país ha intensificado la compra de productos agrícolas frescos como hortalizas, frutas y lácteos principalmente desde Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y El Salvador, datos de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) revelan que entre 2020 y 2024 las importaciones de alimentos desde la región pasaron de 325 millones a 588 millones de dólares, reflejando también un crecimiento en volumen de más de 100 mil toneladas.
Según Germán Pérez, exministro de la SAG, este fenómeno responde a varios elementos. “La importación de productos alimenticios frescos y procesados ha experimentado cambios significativos en los últimos años. Algunos factores que han influido son: el aumento del consumo interno impulsado por las remesas y el crecimiento económico, cambios en los hábitos alimenticios, y mayor preferencia por productos saludables”, explicó y añadió que el cambio climático ha reducido la oferta interna, elevando la dependencia del mercado regional.
El director de Fenagh, José Chacón, señaló que la falta de incentivos concretos afecta al sector agropecuario, pese a condiciones favorables en Banadesa. “El problema es que de nada sirve solicitar un préstamo si no me lo van a dar a tiempo”, expresó, Chacón mencionó que la escasez de mano de obra ha obligado a varios productores a abandonar actividades como la producción lechera.
No obstante, el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) reporta señales de recuperación en el agro, con un crecimiento del 3.7 % en marzo de 2025, sostenido por el buen desempeño de la cosecha de café y una mejora en la producción de maíz, frijol, tubérculos y hortalizas, expertos insisten en que se necesita inversión estatal en infraestructura productiva y seguridad jurídica para consolidar esta recuperación.
(La Prensa)Honduras continúa dependiendo cada vez más del mercado externo para suplir su demanda de alimentos, debido a la disminución en la producción local causada por factores como el cambio climático, las plagas y los altos costos operativos.
De acuerdo con el Banco Central de Honduras (BCH), las importaciones de bienes en el primer trimestre de 2025 crecieron un 3.0 %, alcanzando los 4,700.1 millones de dólares, con un alza significativa en suministros industriales, bienes de consumo, alimentos y bebidas.
El país ha intensificado la compra de productos agrícolas frescos como hortalizas, frutas y lácteos principalmente desde Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y El Salvador, datos de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) revelan que entre 2020 y 2024 las importaciones de alimentos desde la región pasaron de 325 millones a 588 millones de dólares, reflejando también un crecimiento en volumen de más de 100 mil toneladas.
Según Germán Pérez, exministro de la SAG, este fenómeno responde a varios elementos. “La importación de productos alimenticios frescos y procesados ha experimentado cambios significativos en los últimos años. Algunos factores que han influido son: el aumento del consumo interno impulsado por las remesas y el crecimiento económico, cambios en los hábitos alimenticios, y mayor preferencia por productos saludables”, explicó y añadió que el cambio climático ha reducido la oferta interna, elevando la dependencia del mercado regional.
El director de Fenagh, José Chacón, señaló que la falta de incentivos concretos afecta al sector agropecuario, pese a condiciones favorables en Banadesa. “El problema es que de nada sirve solicitar un préstamo si no me lo van a dar a tiempo”, expresó, Chacón mencionó que la escasez de mano de obra ha obligado a varios productores a abandonar actividades como la producción lechera.
No obstante, el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) reporta señales de recuperación en el agro, con un crecimiento del 3.7 % en marzo de 2025, sostenido por el buen desempeño de la cosecha de café y una mejora en la producción de maíz, frijol, tubérculos y hortalizas, expertos insisten en que se necesita inversión estatal en infraestructura productiva y seguridad jurídica para consolidar esta recuperación.
(La Prensa)